Cada pequeño paso cuenta
Una escalera de escaloncitos muy pequeños puede alcanzar la misma
altura que una de escalones mucho más altos, y subir por la primera
sería mucho más manejable. Cada pequeño paso cuenta.
Hacer aunque sea apenas un poquito es infinitamente más reconfortante
que no hacer nada. Y tan sólo un poquito puede llevar rápidamente a tan
sólo un poquito más.
Cinco minutos por día representan dos horas y media al mes, y treinta
horas al largo de un año. Dedicando esos cinco minutos cada día a
concretar mejoras menores puedes dar lugar, sostenidamente y con
firmeza, a logros enormes.
Ofrece un pequeño gesto de amabilidad cada día y multiplícalo a lo largo
de toda una vida. Te encontrarás en un mundo lleno de relaciones
genuinas, ricas y reconfortantes.
Cada pequeño paso cuenta, porque los pequeños pasos son aquellos
que en realidad terminan dándose. No existe virtualmente riesgo en
ellos, y sin embargo las recompensas, en el largo plazo, pueden ser
enormes.
¿Qué pequeño paso haría que tu vida fuese mejor hoy mismo?
Acostúmbrate a dar pasos pequeñitos reales y concretos, y
estarás dando forma a un éxito enorme y duradero.
Y recuerda nunca dejes que nadie y nada te roben tus sueños y siempre mantente enfocado
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