No hay día desperdiciado
Vivir en base a un propósito y claramente centrado, te ayuda
a comprender el valor de mantenerte centrado en algo que
tenga real y verdadero sentido. Y vagar sin rumbo y a la
deriva sin un foco claro también puede ayudarte a valorar el
poder de un propósito real y concreto.
De uno u otro modo, la vida te lleva firme y certeramente
hacia tu propósito. Ya sea que sientas el dolor de perder
contacto con ese propósito, o la dicha de vivir en armonía
con él, crecerás en comprensión y agradecimiento.
Ningún día, ninguna experiencia, ningún encuentro es
realmente un desperdicio. A través de todos los altibajos,
en los buenos tiempos y en las épocas de desesperanza,
sentirás más intensamente la necesidad de expresar quien tú
realmente eres.
La belleza de este día no está en sus circunstancias. La
belleza pasa por que puedas hacerla tuya, toda ella, sea lo
que sea y como sea, y sumarla así a la esencia de tu ser.
Sea lo que fuere que pueda presentarse, siente agradecimiento
por la oportunidad de superarlo. Pase lo que pase, acéptalo
y crece con ello.
Tu propósito no puede hacer otra cosa que fortalecerse, a
cada instante. Siente esa fortaleza y vívela más plenamente,
más auténticamente, día tras día.
Y recuerde nunca permitas que nada,ni nadie le robe sus sueños
y siempre mantengase enfocado y Usted es esa gran oportunidad,
que siempre haz,estado esperando,aprovechala.
Bienvenido a
HONGOMANIA
2 miembros
1 miembro
1 miembro
5 miembros
1 miembro
3 miembros
© 2024 Creada por rafael diaz. Con tecnología de
¡Tienes que ser miembro de HONGOMANIA para agregar comentarios!
Únete a HONGOMANIA